-
¿tú que haces aquí?
-
¿así es como saludas a tu novio?
-
Que novio ni que nada
-
Creo que este chico te va a seguir por todas
partes. Dijo Alex entrando a la habitación, ya hacia bastante tiempo que Alex
no había venido a mí, en cierta forma lo extrañaba.
-
¿tú que haces aquí?, ¿Por qué desapareciste?,
¿A dónde te habías ido?, estaba preocupada. Dije refiriéndome a Alex.
-
Yo no desaparecí, fuiste tú. dijo Daniel,
realmente este chico había estado siguiéndome a todas partes.
-
No te estoy hablando a ti. Dije
-
Ya! Mandy me estas asustando. Volvió a decir
Daniel
-
Recuerda que no me puede ver. Dijo
-
Cierto. Dije. Daniel, tu…¿Qué haces aquí?
-
Yo…soy tu novio. Dijo
-
¿mi novio?
-
Si mi amor. Dijo acercándose peligrosamente,
aprisionándome en sus brazos, haciendo que yo no tuviera escapatoria.
-
Aléjate de mí. Dije y trate de apartarlo y él
se alejo
-
Mandy, ¿apoco si estabas preocupada por mí?
-
¡No!, pero ¿porque tu estas aquí?
-
Bueno ya te dije soy tu novio
-
Ah tu eres el otro agente que va a trabajar
conmigo
-
Exacto, pero llámame mi amor.
-
Estás loco
-
Pero…tu ahora eres mi novia
-
Solo en el exterior
-
No importa, aun así. Saque mi laptop en donde venía
toda la información y comencé a teclear, me mandaron toda la información, donde
trabajaría, de que, todo
-
Una pregunta. Dije y se me quedo viendo. ¿sabes
algo de medicina?
-
¡claro!
-
¿enserio?
-
Sí, soy médico general, cuando entre a la
organización no tenía alguna profesión en específica, solo había estudiado
informática, pero después, como el terrorismo está ligado a armas biológicas
estudie medicina, para entender mejor y bueno a ti no te pregunto, tú me
atendiste en Roma
-
¿atenderte en Roma?
-
Si bueno no creo que te acuerdes. Dijo. Bueno
es bueno que tengas un buen cerebro, podrás quedarte en casa y ayudarme
enviando la información
-
Que quedarme en casa ni que nada, soy agente de
campo
-
Si claro una mujer agente de campo. Dijo
-
Eres un machista
-
No es que sea machista, pero las mujeres no
sirven para esto. Dijo de manera prepotente
-
Eres un. Dije pero me contuve. Mañana empezamos
a trabajar en el hospital, por hoy solo vamos a descansar. Dije, ahora la que
mandaba era yo.
-
Ok. Dijo, lleve mi maleta a la habitación,
estaba acomodando mi ropa en los cajones, escuche un ruido. Ah esta cama se
siente tan cómoda. Dijo Daniel, acomodándose en la cama.
-
¿Qué haces tú aquí?
-
Pues voy a descansar
-
Tú no puedes estar aquí
-
¿Por qué?, este es mi lugar
-
Estás loco, sal de aquí
-
No quiero, tú y yo dormiremos juntos, dormiré
en esta cama.
-
Ok has lo que quieras. Dije tome mis cosas de
vuelta y me dirigí a la puerta.
-
¿A dónde vas?
-
A la otra habitación, ni creas que dormiré
contigo
-
Pero somos novios. Escuche como se levantaba
-
Es solo una mentira. Dije, abrí la puerta, pero
la mano de Daniel me impidió abrirla completamente. Puedes por favor dejarme
salir
-
No.
-
Bueno te atienes a las consecuencias. Dije me
gire, para verlo a la cara, estaba decidida a golpearlo si no me dejaba salir,
pero él fue muy rápido, me tomo de las manos y me llevo hasta la cama, era más
fuerte que yo, estaba encima de mí, sus piernas hacían que no pudiera mover mis
piernas, y me sostenía, pude ver que acercaba su cara para besarme, con mi otra
mano tome un cojín y lo interpuse entre nosotros, el sonrió.
-
Te lo dije ni defenderte puedes sola, no hace
nada que tú no quieras, veras que tu serás la primera en darme un beso. Se levantó.
Te lo digo ahora, mejor solo tú se, la de la información y la de la
inteligencia, yo puedo ser la mente en el campo, las mujeres no sirven para
esto.
-
Ya verás. Dije
-
Bueno me voy, esta es tu habitación, pero si
quieres que me quede contigo me lo puedes decir. Dijo y salió, ahí este chico
realmente era un machista, como es que llegue a involucrarme con él, esa noche
fue tranquila, me levante, prepare mi desayuno, y le di de comer a Yuki, este
estaba sobre una alfombra en la cocina, estaba tomando mi café. Ah que bien dormí,
¿Qué hay de desayunar amor?. Dijo Daniel entrando a la cocina.
-
Primero deja de llamarme amor, segundo cada
quien se prepara de desayunar y tercero apúrate ya nos vamos al hospital.
-
No sé porque pero pienso que esto es una
venganza tuya por lo que paso ayer
-
Piensa lo que quieras. Dije, termine de
acomodar todo y nos fuimos al hospital.}
-
Oh ustedes son los nuevos doctores. Dijo la
enfermera de la recepción, pero no me miraba a mí, sino a Daniel, como si le
estuviera coqueteando
-
Sí, mi novio y yo somos los nuevos doctores.
Dije. Nos podría decir en donde está el director.
-
Claro, vaya todo derecho en el pasillo y la última
puerta, es de su oficina
-
Ok gracias. Dije caminamos los dos
-
Wao me gusto lo posesiva que eres. Dijo Daniel
-
Tsk! No soy posesiva, es solo que por lo menos
si soy tu novia ficticia deberías respetarme
-
¿puedes volver a repetirlo?
-
¿Qué cosa?
-
Eso. MI NOVIO. Me gusto como lo dijiste.
-
Cállate. Dije, toque varias veces la puerta
hasta que alguien nos dijo que entráramos.
Habíamos entrado a ese hospital porque
sospechábamos que ciertos doctores estaban detrás de la formación de las armas
biológicas.
_Jang Keun Suk_
Este viaje a Japón lo estaba usando como una
distracción, nadie en la compañía a excepción de mi manager sabia en donde
estaba, quería estar solo, no sabía que pasaban por mis sentimientos, es que
nunca había olvidado a Young Min, y Mandy solo había sido una chica más en mi
vida, solo me había sorprendido de personalidad, solo eso, no, no sabía lo que
pasaba conmigo, si bien Young Min despertaba ciertos sentimientos en mí,
sentimientos de protección, pero no sabía que era lo que ocurría de verdad, por
eso quería estar solo en estos momentos.
Así como había llegado a Japón, me mantuve en
el departamento que mi manager me había conseguido, mi celular lo había
apagado, ya me había aburrido, cuanto tiempo llevaba dentro de la habitación,
ya un día, decidí salir, era un buen día, tome mi cara y llame a un taxi,
pasamos por varias calles donde las flores de cerezo estaban adornando el
paisaje, tome fotos de la ventanilla, vi a una pareja que pude deducir que eran
doctores por las batas que traían, entrando a una cafetería, la chica lo
empujaba a un lado, pero volteaba a verlo y sonreía, tome mi cámara y capture
en momento, el chico se acercaba y pasaba el brazo alrededor de ella, cheque la
foto que tan bien había salido.
- Deténgase. Le dije al conductor del taxi, le di el dinero y
me baje corriendo, la chica de la foto tenía el mismo perfil que Mandy, estaba
seguro que era ella, corrí lo más rápido hasta la cafetería, busque entre la
gente, pero ella no estaba entre ellos, es que tan desesperado que estaba por
encontrarla que hasta alucinaba, de nuevo aquel sonido de mi corazón
rompiéndose se escuchó de nuevo.
_Mandy_
Estaba en la casa limpiando, era mi día libre, así
que no tenía nada que hacer, por suerte Daniel y yo no teníamos en mismos día
de descanso, así que hoy podía estar en paz de él, a veces me hartaba, todo el
tiempo alrededor de mí, me llegaba a hartar cuando decía que no debía de ser
agente de campo, realmente odiaba que me dijera eso, tome mi maleta para guardarla,
revise cada una de las bolsas que tenía para ver que no quedara nada, había un
trozo de papel, lo saque y era una foto donde salía con un chico joven, tal vez
la foto era de cuando estaba en bachillerato en la secundaria, el vestía un
traje que le ceñía muy bien a su cuerpo y yo traía una roma casual, seguí
observando la foto.
-
¿Qué es lo que ves?. Dijo Alex
-
Oh…ah es que encontré esta foto, no la recuerdo
-
Oh…¿eres tú?
-
Si
-
Eras más bonita antes
-
Ya!
-
Jajaja era broma, aun eres bonita. Dijo
burlándose de mí, termine de limpiar, Yuki se pasaba a mi alrededor, no me
acordaba que no lo había sacado desde que habíamos llegado, tome su correa y salí
por los alrededores, camine pensando en muchas cosas, pero en nada en específico,
Yuki comenzó a jalarse más fuerte hasta que se soltó de su correa, corrí tras
de él.
-
¡Cuidado!. Grito alguien, vi un carro que venía zigzagueando que venía a toda
velocidad, trate de correr, pero mi cuerpo no reacciono, en mis ojos veía
imágenes borrosas, un niño llorando, yo corren, hasta que sentí a alguien que
me tomaba y un fuerte golpe. Estas bien. Escuche en mi oído. Mandy. Decía, tenía
cerrado los ojos, y solo escuche voces lejanas a mí alrededor y después nada,
solo oscuridad.
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