Se escuchaba un leve pitido, olía a alcohol,
mis ojos estaban pesados, sentí un dolor punzante en mi cabeza, y un leve
mareo, poco a poco fui abriendo los ojos y la luz me comenzó a cegar.
-
Está despertando. Dijo alguien a mi lado
-
Mandy ¿Cómo te sientes? Por la voz sabía que
era Daniel. Mi amor. Dijo de nuevo, sentí que me tomaba de la mano, como se atrevía
este chico, le había dicho claramente que no me llamara mi amor, con la fuerza
que tenía, aleje mi mano y me levante, veía borroso, así que no veía bien a las
personas que estaban a mi alrededor. Vamos debes acostarte, no te esfuerces.
Dijo nuevamente Daniel
-
Ash, estoy bien.
-
Segura ¿Qué estás bien? Dijo alguien más, su
voz me era realmente familiar, cerré varias veces los ojos para que mis ojos
volvieran a la normalidad.
-
Si estoy bien. Enfoque mi vista en la persona
que hablaba. ¡Matias!. Grite y lo abrace muy fuerte, creo que lo hice hasta
tambalearse.
_Matias_
Había venido a Japón por órdenes de la empresa
en México, esa mañana había tenido una junta con los ejecutivos, ya me sentía
aburrido, salí a caminar por las calles, Japón era una ciudad con mucho
movimientos, la gente pasaba a mi alrededor, vi a un perro pasar muy rápido
cerca de mí, después a una chica detrás
de él, vi en la calle que venía un carro muy rápido y venia zigzagueando.
-
¡cuidado!. Grite a la chica, pero esta no se movía,
corrí lo más rápido, sentí unas ganas de protegerla, la abrace muy fuerte y la
lleve hasta la orilla, me di un fuerte impacto con la pared de una negocio.
Estas bien. Le dije a la chica, la vi a la cara, era Mandy. Mandy. Dije ahora más
desesperado. Ella cerro los ojos, me levante y la cargue, la lleve al hospital más
cercano, la atendieron, me limpiaron la herida que tenía en mi mano, que por
cierto ni me había dado cuenta que estaba sangrando, hasta que una enfermera me
dijo, entre al cuarto en donde estaba, aun dormía, dijeron que solo se había
desmayado, la había vuelto a encontrar, un chico entro dando un portazo, al
parecer era un doctor, con su estetoscopio checo el ritmo cardiaco , vi su cara
de frustración, se veía preocupado, más que un doctor normal.
-
está despertando. Dije al ver sus ojos abrir.
-
Mandy ¿Cómo te sientes? Dijo ese chico extraño.
Mi amor. Dijo ese chico, me le quede viendo, porque le decía “mi amor”, tomo su
mano, pero Mandy alejaba su mano, esto me hizo sentir bien, claro cuando alejo
su mano, no cuando el chico la tomo, ella se incorporó. Vamos debes acostarte,
no te esfuerces.
-
Ash, estoy bien. Dijo con irritación
-
Segura ¿Qué estás bien? Dije, ella parpadeo
varias veces.
-
Si estoy bien. Dijo, volteo a verme. ¡Matias!. Grito
y me abrazo muy fuerte, que hasta hizo que perdiera el equilibrio
momentáneamente, de nuevo pude sentirla junto a mí, sonreí para mi
_Mandy_
-
Oh Matias…ah lo siento, por mi entusiasmo, pero
es que me da mucho gusto verte
-
No te preocupes, a mí también me da mucho gusto
verte, pero ahorita ¿tu estas bien?
-
Sí, no te preocupes….espera un momento…tú
fuiste el que me salvó de morir aplastada. Dije con un toque de broma
-
Bueno…este…sí.
-
Gracias.
-
Mandy deberías acostarte, debes estar un poco
en reposo. Dijo Daniel
-
Daniel, no te preocupes, fue solo un desmayo,
ya estoy bien.
-
Anda mi amor, quédate quieta. Dijo Daniel un
poco de manera posesiva
-
Daniel, sabes que no me gusta que me digas “Mi
amor”….Matias ya que nos encontramos, ¿no quieres ir a comer?, es mi día libre.
-
Oh claro. Dijo
-
Bueno entonces espera, tengo algo que decirle a
él. Y señale a Daniel
-
Claro, iré afuera. Dijo, salió y se fue.
-
Daniel, ¿Qué es lo que estás haciendo?
-
¿Qué? Dijo inocentemente
-
¿Qué? Dije imitándolo. Eso de “Mi amor”, ya lo habías
dejado de hacer
-
Bueno como tú dijiste que no coqueteara con
nadie, tú también no debes coquetear.
-
No estoy coqueteando… él es un amigo, lo
conozco de años
-
¿así?, ¿desde cuándo?
-
Desde que estaba en el bachillerato. Dije
apagando la voz en la última palabra, como es que recordaba lo que se supone
que no recordaba.
-
Ya ves por eso!, no debes salir con él tal vez
fue tu amor platónico antes, no, no debes salir
-
Estás loco, nos vemos en la casa. Salí de la
habitación, pero entonces recordé
-
¿Y Yuki?
-
Ah esta en tu consultorio
-
Gracias, adiós. Dije, salí de ahí, tome a Yuki.
-
Matias, ¿nos vamos?
-
Vamos. Dijo
-
Vamos a una cafetería que sirven un café muy
bueno, ¿aun te gusta el frappe? Dije así de manera casual
-
Si, sabes que lo amo. Al parecer aún no se daba
cuenta, lo lleve hasta la cafetería, nos sentamos en la ventana, observe la
calle, viendo a la gente pasar.
-
Recuerdo que me gustabas en la escuela. Dije
-
¿Qué?
-
Bueno sé que es raro escucharlo, pero me di
cuenta cuando te vi a ti y a Andrea juntos, no creas que estoy confesando mis
sentimientos.
-
¿recuerdas eso? Dijo
-
Aunque ahora no se mis sentimientos, es
abrumador.
-
Tú… ¿recuerdas a Andrea? Sonreí
-
¿tú que crees?
-
¿desde cuándo?
-
Hoy
-
¿hoy?
-
Bueno, no recuerdo todo, creo que después del
malentendido, recuerdo que nos arreglamos, que todo fue culpa de Andrea, pero
eso está en el pasado, eso ya no importa.
-
Pero ¿cómo es que lo recordaste?
-
Bueno solo así, un montón de imágenes en mi
mente. Reí con sarcasmo, y el solo se quedó serios. Ya ves, vamos debes ser más
feliz Matias!, siempre tan serio, bueno, bueno, es que cuando iba caminando, y
paso lo del accidente de hace un momento, cuando alguien grito cuidado, yo solo
no me pude mover y recordé aquella vez cuando estaban a punto de atropellar a
un niño y yo solo intervine, ese día fue cuando aclaramos las cosas.
-
¿Cómo fue que algo tan simple como eso, pudo
detonar tus recuerdos? Se quedó pensativo
-
Bueno, te lo diré del modo médico, un suceso
que sea del pasado no recordado sea similar a uno del presente, que haya
marcado un suceso importante, pude provocar el desencadenamiento de los
recuerdos que se encontraban encerrados en el cerebro.
-
¿suceso importante?, pero como eso…
-
Bueno te lo diré, para mí, ese día contigo, fue
muy importante, fue el día que volvía a tener a mi amigo de nuevo, el día que
aquellos sucesos dolorosos del pasado se disiparon, fue importante para mí.
-
¿enserio?
-
¡Claro!, porque siempre fuiste un buen amigo
-
¿Qué tanto recuerdas?
-
Bueno es que tuve varios recuerdos, pero como
si fueran sueños, así que no sé qué tanto es verdad
-
Entonces ¿recuerdas nuestros problemas? Dijo de
manera tímida
-
Si, bueno, pero eso ya no importa, tal vez
ahora al recordarlo ya no duele, ya quedo para mí en el pasado, ahora lo que
importa es el presente, solo eso, y me alegro haberte encontrado de nuevo.
-
Mandy se ve que estas muy bien
-
Si eh trabajado, en esto en otro, de un lado
para otro, a todo esto ¿trabajas en Japón?
-
A no, es que la empresa de México se asoció con
la de Japón y vine yo hasta acá, creí que iba a ser un viaje aburrido, pero
ahora te eh encontrado, aunque…
-
¿aunque?...
-
No sé si te acuerdas que la última vez que nos
vimos, te dije que la 3era vez que te encontrara, sería la última y ahora ya no
te dejaría, yo iba a estar en tu vida de nuevo
-
A eso….bueno como quiera, yo no te iba a dejar
ir, ahora que lo recuerdo todo, te quiero en mi vida de nuevo, perdón por lo
ultimo
-
¿Qué cosa, lo de estar en tu vida?
-
No…eso no, perdón si antes te trate con
frialdad, pero es que no quería recordar, el dolor que me producía era mucho
-
No te preocupes, como dijiste, ahora solo
importa el presente y solo eso.
-
Si está bien.
-
Mandy, ahora te ¿puedo hacer una pregunta?
-
Claro
-
Este tú, ¿volviste a recordar a Jang Keun Suk?.
Dijo viéndome a los ojos.
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